Para quienes habitamos latitudes templadas la vida en Escandinavia no parecería de este planeta. Por supuesto, antes que nada está el clima. En enero por ejemplo, que en Buenos Aires amanecimos con una temperatura constante de 27 grados, la salida del sol estaba prevista en Oslo para las 8.58 am. Su puesta a las 13.47. Casi cuatro horas de sol en el día, o mejor dicho, cuatro horas de penumbra y otras veinte de oscuridad. En seis meses la relación acabaría siendo exactamente la inversa. Veinte horas de luz quemante y apenas cuatro de iluminación tenue, como si al sol le hubieran corrido un terciopelo por un ratito.
Como es posible la vida en este «otro» planeta, es un verdadero misterio para este gaucho de las pampas. A ver… ¿Es siquiera viable biológicamente vivir tres meses sin la luz del sol y otros tres sin poder desprenderse de ella? Sin abundar en “detalles adicionales” como temperaturas medias de -20 grados centígrados o días/noche completos con tormentas de nieve. ¡Pero aún más incomprensible es el hecho de que Noruega haya sido premiada por la ONU en 2017 como el país donde sus habitantes tienen mayor índice de felicidad! Más aun, no abandonó nunca el Top 5 desde que se creó el índice hace ya cinco años. ¡Y además ninguno de sus compañeros escandinavos lo hizo!
Fue en 2012 que Naciones Unidas instauró el 20 de marzo como el “Día mundial de la Felicidad” con el objetivo de publicar sus estadísticas. Ya entre 1967 y 1973, precisamente un escandinavo notable, finlandés en este caso, publicaba una primera investigación que se convertiría en estándar para el análisis de la diversidad cultural. Geert Hofstede había descubierto 4 grandes categorías para describir una cultura nacional, producto de su trabajo de investigación para IBM. Con el tiempo sofisticaría el modelo hasta contemplar seis. Según el autor las culturas nacionales pueden ser evaluadas en algún punto del continuo de las siguientes variables:
- Distancia al poder (o fortaleza de la cadena jerárquica)
- Percepción del tiempo (orientación al largo plazo vs el corto plazo)
- Tolerancia a la ambigüedad
- Individualismo / Colectivismo
- Prevalencia en la sociedad del carácter femenino / masculino (orientación a las personas / orientación a las tareas)
- Grado de «plenitud o felicidad » de la sociedad.
La última fue agregada recién en 2010, acaso anticipando lo que sería la toma sistemática de la encuesta de la ONU desde 2012. Si bien hay algunas diferencias técnicas respecto de la definición de «felicidad» en uno y otro caso, también hay similaridades que permiten obtener alguna conclusión acerca de cómo las cinco variables anteriores determinan o contribuyen a definir el estado de la última. Continuar leyendo